La importancia del ahorro y de vivir por debajo de tus posibilidades

Lo importante no es cuánto dinero generas o ingresas mensualmente, sino cuánto dedicas al ahorro, la planificación de imprevistos y, más importante, a las inversiones o adquisición de bienes que generen riqueza a futuro.

Ramón Liranzo | Asesor de Finanzas personales

¡Hola, querido lector! En la entrada de hoy quiero contarte, desde mi experiencia, por qué es necesario ahorrar y vivir por debajo de nuestras posibilidades. En una entrada anterior te conté la historia de cuando me negaron un aumento de sueldo y lo que hice para no quedarme de brazos cruzados; y en otra te comenté, entre otras cosas, que había renunciado al trabajo en el que estaba. Antes de continuar, debo mencionar que ya encontré otro trabajo similar pero mejor remunerado. 😊

Una inversión en conocimiento paga el mejor interés (Benjamin Franklin)

A los pocos meses de comenzar a trabajar en el último empleo al que renuncié, abrí una cuenta de ahorros separada de la cuenta donde me depositaban el salario. Esto con la intención de ver crecer mi ahorro mes a mes y mantenerme así motivado. El presupuesto que definí en aquel entonces, y que hoy día todavía mantengo, es el siguiente:

• 50% para necesidades básicas.
• 20% para ahorro e inversión.
• 10% para salidas de ocio.
• 10% para donaciones.
• 10% para educación.

Este presupuesto lo leí por primera vez en el libro titulado “Los secretos de la mente millonaria” 📚, una lectura muy recomendable. Y de seguirlo, ya estarías cumpliendo tanto con el ahorro como con el hecho de vivir por debajo de tus posibilidades. Es necesario decir que no todos nos encontramos en la misma situación vital. Hay quien tiene más o menos responsabilidades. En mi caso, soy un hombre soltero que vive en casa de un familiar. Sin hijos pero con 5 mascotas que alimentar. 😉

La riqueza no consiste en tener grandes posesiones, sino en tener pocas necesidades (Epicteto)

Antes de renunciar a mi anterior empleo, analicé durante cuánto tiempo podría subsistir con mis ahorros y sin contar con una fuente de ingresos considerable. Debo añadir que no soy una persona caprichosa: tengo la cantidad indispensable de ropa, no me agrada mucho viajar, no me verás ni con el teléfono ni el auto más chics… 🤷‍♂️ Y las actividades de ocio que me gustan son muy asequibles; desde sentarme en un parque a contemplar la naturaleza hasta tomarme un par de cervezas en compañía de un amigo.

Opino que en las sociedades citadinas contemporáneas muchas veces se confunde el vivir cada día al máximo con el hecho de excederse en nuestras pasiones; entre ellas, gastar en exceso. Y, para más inri, solemos gastar dinero que no es nuestro, ya sea a través de un préstamo o de una tarjeta de crédito. 🤯 Por mi parte, prefiero aprovechar mi juventud para asentar unas sólidas bases financieras para cuando mi cuerpo y mi mente ya no estén tan ágiles.

Los problemas de dinero no se resuelven con más dinero, se resuelven con educación financiera 📚

De no haber tenido un presupuesto, no habría podido construir un ahorro considerable. De no haber tenido este ahorro, no habría tenido la posibilidad de renunciar a un puesto de trabajo en el que ya no estaba a gusto ni me sentía valorado. Adicional a esto, el saber que contaba con una cantidad de dinero que me permitiría seguir cubriendo mis responsabilidades y necesidades por varios meses, me permitió aprovechar el tiempo que estuve desempleado para seguirme formando como profesional. 🧑‍💻 Y de esta manera convertirme en un candidato más atractivo para los reclutadores.

Gracias a este enfoque fue que, en menos de 5 meses, pude encontrar un nuevo empleo mejor remunerado y dentro de una empresa que me inspira por su origen nipón y los valores que promueve. Aprovecho el contexto para citar una frase que se le atribuye al inversor Warren Buffett: “No tenemos que ser más inteligentes que el resto, tenemos que ser más disciplinados que el resto”. Yo no me considero el más lumbreras de mi clase, con todo, sí que soy disciplinado cuando cuento con las motivaciones adecuadas.

Todo lo que les digo es como el Aikido, uso a mi favor la fuerza del enemigo 🎤

Como comenté en un párrafo anterior, tengo muy presente que mi juventud no durará para siempre. Por ello, considero que ahora es el mejor momento para asentar unos buenos fundamentos y obtener conocimiento a través del método de prueba y error; dado que tengo más espacio de maniobra en caso de meter la pata. Esto también lo aplico a mis finanzas. Siendo mi objetivo a futuro que gran parte de mis ingresos sean pasivos. Y así, trabajar solo si lo deseo, mas no porque lo necesito.

Quizá peque de atrevido, pero opino que este objetivo último debería ser al que la gran mayoría de las personas que conformamos la clase trabajadora apunte. Ya que es muy inocente e irresponsable pensar que podremos ganarnos “el pan” activamente durante toda nuestra vida adulta o que el estado se hará cargo de nosotros. Afortunadamente, dentro del sistema financiero del que formamos parte, existen diferentes vehículos de inversión: mercado de valores, bienes raíces, certificados de depósito a término… Todo dependerá de tus posibilidades y tus preferencias. 😌

En resumidas cuentas…

• Ahorrar y vivir por debajo de tus posibilidades te colocan en una posición de ventaja para tomar decisiones más acordes a tu filosofía de vida y tus metas.
• Seguir con disciplina un presupuesto bien definido, te da espacio para la diversión y para la inversión.
• No siempre tendrás la vitalidad de hoy para trabajar así que, es una buena idea que, a futuro, gran parte de tus ingresos sean pasivos.

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